BLOG DE OJOS

Cuidado de los ojos, consejos oftalmológicos, opinión, cosas de Elche... Un blog del Dr. Soler y su equipo con inquietudes, recomendaciones y propuestas globales en red.

Tipos de glaucomas (I): El glaucoma congénito

El Glaucoma constituye un grupo de enfermedades que poseen ciertas características en común como el daño del nervio óptico (excavación y atrofia) y la pérdida del Campo Visual. Existen diferentes tipos de glaucomas al igual que distintas formas de manifestación y evolución, pero desde el punto de vista práctico podemos distinguir unos pocos que son los más importantes.
Vamos a revisar en sucesivas entradas los diferentes tipos de glaucoma, empezando por uno muy infrecuente pero muy llamativo, el glaucoma congénito.

Aunque su frecuencia es muy baja, se debe conocer para diagnosticarlo a tiempo muy precoz y poder tratarlo. Este tipo de glaucoma aparece en el momento del nacimiento o en los primeros meses de vida y se produce porque el desagüe del humor acuoso está obstruido por una lámina fibrosa lo que provoca una resistencia a la salida de este líquido del ojo aumentando la presión intraocular.

En el glaucoma congénito el desagüe está cubierto por una fina membrana que impide la salida del humor acuoso subiendo por tanto la presión intraocular.

En el glaucoma congénito el desagüe está cubierto por una fina membrana que impide la salida del humor acuoso subiendo por tanto la presión intraocular.


En el glaucoma congénito las paredes oculares están formándose y no son rígidas como en el adulto, por lo que el aumento de presión intraocular no solo se transmite al nervio óptico, sino a todo el ojo, por lo que éste tiende a hincharse como un globo. El aumento es tal que llega a tener aspecto de “ojo de buey”, lo que se conoce como buftalmos. Como consecuencia de ello aparecen signos y síntomas donde destacan el lagrimeo, la fotofobia (no es capaz de mantener los ojos abiertos cuando hay luz), la córnea va perdiendo transparencia y se ve mal el color del iris. Al principio las madres están felices con esos ojos tan bonitos y grandes que tienen sus bebés, ignorantes del problema que realmente sufre.

El Buftalmos u ojo de buey es la evolución natural del glaucoma congénito

El Buftalmos u ojo de buey es la evolución natural del glaucoma congénito

El objetivo de diagnosticarlo precozmente radica no sólo en regular la presión intraocular sino también preservar la agudeza visual. El tratamiento suele ser quirúrgico mediante una intervención llamada goniotomía, que busca abrir la membrana que dificulta la salida del humor acuoso.

El glaucoma congénito tiene que ser monitorizado de por vida para despistar nuevos aumentos progresivos de la presión intraocular y prevenir, detectar y tratar la ambliopía.

Autor: Fernando Soler

• Oftalmólogo y Doctor en Medicina y Cirugía.
• Director de Innova Ocular Clínica Dr. Soler en Elche.
• Presidente de la Fundación Dr. Soler.
• Director de FacoElche.
• Ex – presidente del Grupo Innova Ocular
• Jefe de Servicio en excedencia del Hospital General Universitario de Elche.

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